miércoles, 2 de noviembre de 2011

Martín, el arriconnado

me monto en  mi lomo
y como forastero bromeo ante la tregua
¿de que vale mi mano abierta
si los cielos giran mi conducción?
¿dónde he ido?
vagabundeo con la inacción del corroído

Estaciono el boicot y pienso
bastaría con un golpe para terminar con el,
entonces, los vocablos me asedian
y corrigen mi predica
pero yo,
yo,
yo sin embargo
como un interrogante exclamo sin intriga.
¡donde he ido!
¿donde he ido?


1 comentario: